Qué reformas debe tener un local para conseguir la cédula de habitabilidad
Analizamos qué características debe reunir un local comercial para poder convertirse en vivienda y qué reformas se deberían llevar a cabo
¿Es posible que un local comercial se convierta en vivienda? La respuesta es sí, aunque éstos deberán cumplir con una serie de requisitos para considerarse habitables. Para empezar, deberán disponer de la cédula de habitabilidad que, precisamente, indica si una propiedad tiene todos los componentes necesarios para ser habitada.
Dado que es bastante habitual comprar locales comerciales para convertirlos en inmuebles, en este artículo de Fotocasa analizamos qué reformas se deben llevar a cabo para conseguir la cédula de habitabilidad y, en consecuencia, poder vivir en ellos.
¿Qué características debe tener un local comercial para disponer de cédula de habitabilidad?
Como norma general, un local no está preparado para uso residencial; es decir, no suele disponer de cédula de habitabilidad y, en consecuencia, no es legal vivir en él. Sin embargo, con una serie de reformas sí se puede conseguir transformar un local en un inmueble habitable.
Pero antes debemos tener en cuenta una serie de condiciones que dicho local debe cumplir y, sin las cuales, no podrá aspirar a conseguir la cédula de habitabilidad y, en consecuencia, convertirse en vivienda. Son las siguientes.
Un local no está preparado para uso residencial, es decir, no suele disponer de cédula de habitabilidad y, en consecuencia, no es legal vivir en él
Debe estar construido en un terreno con clasificación urbanística de suelo urbano
Debe medir 35 metros cuadrados, como mínimo, o 25 metros cuadrados si se va a convertir en un estudio
Debe disponer de una altura mínima de 2,5 metros entre el suelo y el techo
Debe disponer de salida de humos en la cocina y el baño
Debe poder disponer de un baño delimitado, separado del resto de estancias
Debe estar al nivel del suelo (nunca por debajo de la rasante o en un sótano)
Debe disponer de buena ventilación
Debe cumplir con las normas de accesibilidad
Debe disponer de ventanas, dado que debe contar con luz natural, por lo que precisará de una fachada lo suficientemente ancha
Debe cumplir con la normativa actual de eficiencia energética
Debe poder disponer de una instalación homologada de tuberías de evacuación de aguas
Debe disponer de portero electrónico
Junto a todos estos parámetros, es importante tener en cuenta otras cuestiones más técnicas, sin las cuales un local no podrá disponer de la cédula de habitabilidad.
Normativas de las Comunidades Autónomas
Cada Comunidad Autónoma tiene unas normas específicas sobre qué características concretas debe tener una propiedad para considerarse habitable. Entre ellas, se encuentran la mayoría de las que hemos analizado en el punto anterior.
Normativas urbanísticas
Para asegurarnos de que el suelo es edificable deberemos consultar el planeamiento urbanístico del municipio en el que se encuentra el local, para asegurarnos de que, efectivamente, se encuentra en suelo urbano.
Cada Comunidad Autónoma tiene unas normas específicas sobre qué características debe tener una propiedad para considerarse habitable
Normativas técnicas
Todas las viviendas de España deben adaptarse al Código Técnico de la Edificación (CTE), en el que se recogen ciertos parámetros que determinan cómo debe ser un local para que se pueda convertir en vivienda, especialmente a lo que a seguridad y accesibilidad en el inmueble se refiere. Estos parámetros también variarán entre las distintas comunidades autónomas.
Normativas comunitarias
Si queremos reformar un local que forma parte de una comunidad de propietarios deberemos revisar si los estatutos de la comunidad de vecinos recogen algún tipo de prohibición sobre si se pueden o no hacer más viviendas en el edificio y toda la normativa al respecto.
¿Qué otros factores debemos tener en cuenta para que un local comercial se convierta en vivienda?
Ahora que ya tenemos claro qué características y requisitos debe cumplir un local comercial para poder convertirlo en vivienda, debemos tener en cuenta otros factores importantes.
En primer lugar, y siempre que el local cumpla con todo lo que hemos mencionado, necesitaremos un proyecto de reforma avalado por un arquitecto, que deberemos presentar al ayuntamiento de la localidad en la que se encuentra la propiedad. Si éste lo aprueba, deberemos pagar los impuestos y las tasas municipales correspondientes para la solicitud de la licencia de obras.
Cuando ya se hayan llevado a cabo todas las reformas necesarias podremos pedir la cédula de habitabilidad y solicitar el certificado de eficiencia energética. Finalmente, deberemos presentar al ayuntamiento el certificado de finalización de obra y la modificación catastral.
Cédula de habitabilidad: qué es y cómo tramitarla
Ahora sí, ¡ya podremos disfrutar de nuestra nueva vivienda!
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